Lo Existencial es Político, Lo Político es Existencial

No Espiritual, Existencial

Tiendo a no utilizar la palabra "espiritual" para describir a las personas que se dedican a investigar la naturaleza y el significado de la existencia, porque (a) establece inmediatamente una dicotomía con "material", dando a entender que las personas que investigan la naturaleza y el significado de la existencia no están interesadas en lo material, o incluso se oponen a ello, y (b) porque, para mi, se ha recubierto de asociaciones de santidad, piedad y superioridad, así como de abnegación, autoengaño y el retorcido surgimiento de deseos reprimidos.

Así que prefiero hablar de una investigación existencial, en lugar de una investigación espiritual. Y por "existencial" no quiero decir limpio, siempre-sonriente y trascendente, sino honesto, abierto y valiente. Para mí, "una persona comprometida existencialmente" es aquella que se atreve a enfrentarse cara a cara con el Gran Misterio, el Gran Desconocido en el que todos nos encontramos - que no se esconde tras ideas preconcebidas, prejuicios o dogmas - que está dispuesta a reconocer sus deseos, a seguir abriéndose a través de sus miedos, y a percibir el momento de nuevo - una y otra vez.

Afrontarlo Todo

La palabra "espiritual" se asocia a menudo con ser testigo. En este sentido, en lugar de participar en la vida, "la persona espiritual" es testigo de ella. Observa el transcurrir de los acontecimientos mundanos, del mismo modo que practica la observación del paso de los pensamientos, las emociones y las sensaciones mientras medita. Del mismo modo que se esfuerza por no enredarse - ni aferrarse, ni oponerse - a los pensamientos que pasan mientras medita sentado, al estilo de los Budas, también se esfuerza por no enredarse en los altibajos de la vida cotidiana. La mente de la persona "espiritual" está fija en algo que ve como "superior" - Dios o La Diosa o La Unidad - algo inmutable - y por lo tanto se desinteresan de la naturaleza siempre cambiante del mundo fenoménico.

Me gustaría contrastar esto con un "enfoque existencial", un enfoque totalmente honesto - el intento de no negar nada, de enfrentarse a todo, de incluirlo todo - aunque es más un modus operandi, una forma de viajar, que una cosmología o teología fija y definitiva...

¿Hay un "observador" fijo e inmutable presente, no sólo cuando meditamos, sino también a lo largo de nuestra vida cotidiana? Yo lo percibo, sí. Pero, ¿hay también una corriente interminable de pensamientos, emociones, intuiciones, imaginaciones, deseos y sensaciones? Sí, eso lo percibo también. ¿Existe una quietud y una amplitud que parecen abrazar todas las cosas? Para mi - parece que sí. Pero, ¿existe también un ciclo interminable de estaciones, de semillas que se convierten en flores que se convierten en frutos, de nacimientos y muertes? ¿Existe también una procesión interminable de acontecimientos? ¿Hay también penas y alegrías, uniones y separaciones, tiempos de calma y tiempos de aventura? Sí, para mi existe todo eso también. Entonces, ¿por qué aferrarse sólo a lo inmutable? ¿Por qué preferir la quietud al movimiento? ¿Por qué no abrirse a todo?

Sí, estoy de acuerdo en que necesitamos aprender CÓMO permanecer abiertos a todo, pero en mi opinión no podemos valorar sólo lo invisible, lo numinoso y nuestra unidad. Tenemos que incluir nuestras limitaciones, nuestros miedos y vergüenzas, nuestras ambiciones y propósitos - los días y las noches y las estaciones de nuestra humanidad - de lo contrario sólo estaremos afrontando la realidad de forma selectiva, no estaremos afrontando verdaderamente el Misterio Completo de la Existencia, con todas sus paradojas e indefinibilidad.

Sí, aprender CÓMO puede llevarnos toda una vida. Nos obsesionamos demasiado con Lo No-Cambiante (negando nuestros condicionamientos y deseos), y Lo Cambiante salta y nos da una patada en la cara. Lo vemos, por ejemplo, en los escándalos sexuales que abundan entre los super-espirituales. Nos obsesionamos demasiado con El Cambiante (nos volvemos ajenos a nuestra unidad, perdemos el contacto con el asombro y la reverencia), y nos sentimos vacíos e insensibles, y necesitamos aliviar nuestro sufrimiento con adicciones autodestructivas de todo tipo. Sí, el arte de permanecer abierto tanto a Lo Cambiante como a Lo No-Cambiante - de afrontar verdaderamente TODA esta experiencia multifacética y milagrosa de existir- es un viaje de aprendizaje prolongado, sutil y sofisticado. Pero creo que es uno que debemos emprender si queremos enfrentarnos de verdad a esta realidad en la que nos encontramos - si realmente queremos recorrer el camino existencial.

Sin Salida

Si aceptamos el reto de El Camino Existencial, si decidimos afrontarlo todo - y no ser exclusivamente "espirituales", ni exclusivamente "materiales"- entonces admitimos que estamos aquí, en el mundo... Aceptamos que somos partícipes del drama humano, que estamos en él, que formamos parte de él. Y ya sea hechizados por nuestros egos (y empujados irresistiblemente a participar), o dotados de presencia (y capaces de discernir cómo participamos), vemos que no podemos NO participar.

No decir nada sigue siendo una declaración. Mantenerse al margen sigue siendo una intervención. Incluso decir que no nos importa es una contribución emocional a la constelación de emociones humanas colectivas. No hay escapatoria. Así que la cuestión es CÓMO participamos y si hay una forma específica de que las "personas existenciales" participen en el drama humano. Yo diría que hay una manera. No una forma en términos de contenido, de lo que hacemos, de la elección de la acción - sino una forma en términos de nivel de conciencia e intención.

Como los "individuos existenciales" son honestos, aceptan que si hubieran nacido en otra época o en otra cultura, sin duda estarían apegados a creencias muy distintas. Por eso no sólo no son fanáticos de sus propias creencias, sino que también se interesan por las creencias de los demás. Como son honestos, no niegan que creen en lo que creen, pero mantienen sus creencias a la ligera. Por tanto, favorecen y tienden a co-crear una atmósfera cultural de investigación abierta y compartida.

A esto me refiero cuando digo que los "individuos existenciales" actuarán todos de la misma manera "en términos de nivel de conciencia e intención". Actuarán (no negarán que son partícipes en los dramas de las generaciones) - y aunque el contenido de su acción pueda diferir (uno puede ser profesor, otro limpiador, otro poeta, otro político) - debido a su honestidad existencial, todos tenderán a crear una sociedad de apertura, amabilidad y respeto mutuo.

Volcados Hacia Todo

En mi experiencia propia, y en mi opinión - cuanto más profundamente se enfrenta una persona a la realidad de la existencia, más se da cuenta de que la existencia está más allá de toda definición. La ciencia puede ayudarnos a entender cómo funcionan las cosas. Pero no puede decirnos POR QUÉ existimos. Por muy inteligentes que nos consideremos, o superiores a las demás especies con las que compartimos este planeta, o experto en la manipulación de la materia - seguimos siendo como el padre que no puede responder a la pregunta de su hijo "¿por qué el cielo es azul?". Tal vez podamos explicar sus componentes químicos, y qué es lo que lo hace azul - pero no por qué es azul. Ni por qué hacemos preguntas. Ni por qué existe la existencia.

La religión puede aportar teorías especulativas: que Dios nos puso aquí para aprender, para crecer. Sí, pero ¿por qué? ¿Por qué Dios nos puso así? ¿Por qué no nos creó completamente adultos, ya dotados de un conocimiento innato de todo lo que supuestamente estamos aquí para aprender? Otros afirman que La Unidad se auto-dividió para experimentar la relación, para reconocerse a sí misma, para conocer el amor, o simplemente para divertirse con experiencias de texturas infinitamente diferentes. Quizá sea cierto. Pero, ¿por qué? ¿No estaba la Unidad satisfecha con su propia dicha infinita?

No pretendo descartar nada de lo anterior. Hacerlo sería suponer que tengo yo "la" respuesta. Pero no - miro la realidad a la cara - me comprometo plenamente con el camino existencial - miro las montañas, las cascadas, las flores en primavera, las estrellas por la noche... y entro dentro de mi propio sentimiento... y sólo queda aprecio, amor, gratitud y asombro. Esta es la maravilla del viaje existencial. Y aquellos que comparten este camino naturalmente co-crearán un tipo muy específico de sociedad. Co-crearán de forma natural comunidades que se acerquen a la realidad con respeto amoroso, que se relacionen con otras especies con respeto amoroso, y que se relacionen de ser humano a ser humano con respeto amoroso.

Una "persona espiritual" (en el sentido que he descrito la palabra) puede vivir una vida sin consecuencias sociales o políticas. Puede dar la espalda al abuso de la naturaleza, a la desigualdad, a la crueldad, a la guerra - porque, al fin y al cabo, todo eso son asuntos "materiales". Pero una "persona existencial" - que no presume de "conocer la verdad" (ya sea religiosa o científica), que se enfrenta plenamente al Misterio del Momento y, por tanto, experimenta su milagrosidad, y se siente humilde y honrada con los demás - no da la espalda a nada. Se vuelve hacia todo. Y ve, siente y actúa no sólo con honestidad intelectual, sino con la honestidad del corazón.

Ama Al Tirano, Odia La Tiranía

¿En qué dirección se está desarrollando el drama humano? En mi opinión, y en términos generales – se está moviendo hacia el dominio de la Inteligencia Artificial, la Tecnología Bio-Digital, la Modificación Genética, el Transhumanismo, el Internet de los Cuerpos y las Cosas, las Ciudades Inteligentes, los CBDCs, los Sistemas de Crédito Social, la Tecnocracia, la Eugenesia... en resumen - tal y como dice la Biblia Judeo-Cristiana "Dios creó al hombre a su imagen y semejanza" - el liderazgo y la dirección de la humanidad, embelesados por la visión de un Universo Mecánico, están ahora, a principios del siglo XXI, intentando crear una Tierra Mecánica tecno-modificada.

Está claro que este no es el tipo de cultura global que las personas existenciales co-crearían. No es una visión del futuro inspirada en la apertura, la confianza y el amor a la vida. Se trata de una visión basada en "la religión de la ciencia" (que la conciencia es un epifenómeno del cerebro, que sólo los fenómenos medibles existen realmente, etc.), que (como todo fanatismo) descarta todo desacuerdo (como "desinformación"), y que no está impulsada por la reverencia al Gran Misterio Sagrado de la Existencia, sino que busca dominar y controlar despiadadamente todo el planeta, y en última instancia, todo el universo.

Entonces, ¿qué deben hacer las personas existenciales? ¿No hacer nada? Existe la creencia popular de que las "personas espirituales" - aquellas que conocen el Amor Universal más allá de nuestra individualidad - son siempre pacíficas, equilibradas, ecuánimes, amables, suaves y bondadosas. Sin duda, ¡nunca se enfadan! Pero, una vez más - ésta es una autoimagen perpetuada por quienes niegan la belleza y la fealdad de este mundo en constante cambio, quienes niegan peligrosamente sus deseos y quienes buscan estatus a través de la superioridad espiritual.

Desde el punto de vista existencial, podemos amar la Esencia Inmutable del tirano más terrible y, al mismo tiempo, odiar su tiranía. Podemos odiar la sobre-vacunación de los bebés, podemos odiar la imprudencia de la geoingeniería, podemos odiar los pesticidas y los medicamentos y alimentos de plástico procesado, y las sonrisas industriales petulantes. Podemos sentir nuestra unidad con todo el mundo y, sin embargo, sentir cómo algunos de nuestros hermanos y hermanas están inflados de auto-importancia, manipulando con arrogancia descarada los medios de comunicación, e idealizando banalmente "la ley". Podemos ver sus almas, pero odiar su insensibilidad, su artificialidad, su rigidez, y su vacuidad moral... Podemos odiar sus guerras cínicas, especuladoras - asesinas de soldados, asesinas de civiles...

Después de años y años en el camino existencial, algunos de nosotros podemos eludir nuestros egos, y utilizarlos, y no ser-utilizados por ellos - algunos de nosotros conocemos la paz y la felicidad de Nuestra Unidad - pero eso no significa (a) que podamos salir del drama humano, o (b) que nuestras personalidades estén siempre en un punto neutro - aceptando la crueldad tanto como el cariño, la avaricia como la generosidad, y así sucesivamente. Lo siento, pero del punto de vista existencial - ¡eso no tiene sentido! Si alguien sintiera lo mismo cuando le pegan a su hijo, o cuando lo abrazan con dulzura, ¿se convertiría en un santo? ¡Por favor!

Activismo Existencial

Podemos conocer el Amor Universal que lo une todo, que nos une a todos, El Cual Somos Todos – y a la vez sentir asco por la superficialidad y falta de corazón de nuestros lideres escogidos y no-escogidos y sus seguidores fieles – y no ser engañados por sus oraciones sobre la ecología y la igualdad – y negar a someternos a sus planes para una Tecno Tierra.

En el camino existencial nadie reclama el título de "iluminado". Caminamos con honestidad, franqueza y amor, y no negamos nuestra propia vanidad, obsesión e ilusiones. Pero precisamente porque accedemos al centro más profundo, inmutable, expandido y abarcador de nuestro ser, las cualidades de nuestro centro nos infunden. Y actúan a través de nosotros.

No amamos porque una vez leímos sobre el amor en un libro sagrado y nos hemos tejido un "ego amoroso" - amamos porque en el corazón de nuestra humanidad encontramos, no lo que queremos que esté ahí, sino lo que nos espera pacientemente a todos: un Amor Universal no romántico, ni sentimental.

Cuanto más nos liberamos de los filtros de nuestro condicionamiento, más claramente nos vemos a nosotros mismos, y más claramente lo vemos todo. Y eso significa que vemos tanto El Gran Misterio que envuelve todo en Bendición - como la horrible locura psicopática de nuestros líderes mundiales, y la igualmente repulsiva conformidad de sus seguidores.

El cariño que llevamos a nosotros mismos, lo llevamos a los demás. Nos perdonamos a nosotros mismos, y perdonamos a todos. Pero también vemos con radiante claridad lo que no es cariño. Miramos humanamente nuestra humanidad, y la de los demás. Y decimos "¡no!" a lo inhumano.

Todos estamos familiarizados con las frases "lo personal es político" y "lo político es personal" que surgieron de Las Luchas del Corazón del siglo pasado. En nombre de las Luchas del Corazón del siglo que viene, me gustaría añadir "lo existencial es político", y "lo político es existencial".

Mark the Mystic Activist

Aragón, España.

Primavera 2024

www.markthemysticactivist.com

TRIBUS CONSCIENTES Semillas de una Cultura Nueva

Imagen de Art Photography,

Carl O, Pinterest